Le Jonction (11-08-2011)

Distancia: Aproximadamente 12Km ida y vuelta.

Cota mínima: Telesilla de Les Bossons 1.400 m

Cota máxima: La Jonction  2.590 m.

Desnivel: 1200 m.
Dificultad técnica: Sencilla, la única dificultad es el desnivel.

Material usado: Bastones.

Como ruta de despedida de los Alpes franceses, por este año, decidimos subir hasta lo que se denomina “Le Jonction” o “La Unión” en castellano. Como su nombre indica se trata de una península de roca situada a 2589m de altitud donde se juntan los glaciares que bajan desde los picos más altos del Macizo del Mont Blanc hacia el valle de Chamonix. En esta zona el caos de seracs es increíble, donde enormes bloques de hielo se elevan unos sobre los otros proporcionando una visión de lo más espectacular que pueda disfrutarse en los Alpes.

Por si esto fuera poco, esta ruta tiene su connotación histórica puesto que fue la primera etapa de la primera ascensión al Mont Blanc, ayá por el año 1786. Pues no ha llovido ná desde entonces, nada más y nada menos que 225 años. Después de varios intentos por otras vías, finalmente un 8 de Agosto de aquel año Balmat y Paccard coronaron la cumbre del pico más alto de los Alpes y bajaron sanos y salvos en lo que ha sido una de las más grandes hazañas del alpinismo de todos los tiempos. Según creo, en su primer día siguieron aproximadamente esta ruta e hicieron noche en un abrigo natural en el límite de la zona de hielo, muy cerca de lo que hoy se conoce como Le Jonction. Aún hoy sigue siendo una de las vías de ascensión al Mont Blanc por Les Grands Mulets.

Bueno después de esta pequeña introducción histórica vayamos al grano. Primeramente hay que acercarse hasta la base del telesilla de Les Bossons (1050 m), que tiene salida indicada en la autovía que va a Chamonix, y dejar el coche en el aparcamiento. Una vez allí hay dos opciones o coger el telesilla que te sube hasta los 1400 metros o bien subir a pata. Nosotros tomamos el remonte que en cinco minutos te deja muy cerquita del Chalet de les Bossons, con restaurante, terraza con vistas al glaciar y pequeño sendero temático sobre los glaciares. Como curiosidad decir que en su terraza conservan varias piezas de un avión que en los años cincuenta se estrelló en el Macizo del Mont Blanc y que después de los años el glaciar de Bossons devolvió.

Después de babear un rato con las vistas que hay desde el chalet comenzamos realmente la ruta por un sendero que indica Le Jonction y que marca cuatro horas, que fue lo que realmente tardamos en llegar. Un abuelete francés que iba solo y que tenía pinta de montañero de toda la vida nos dijo que nosotros que éramos jóvenes podíamos hacerla en menos tiempo, pero el no sabía lo cansinos que somos con las fotos, jajaja.

El sendero en sus inicios no tiene ninguna complicación y sube de forma constante y sin tregua por sucesivas zetas a lo largo de la Montagne de la Cote, que se sitúa entre las lenguas de los glaciares de Bossons y Tacconnaz. El camino discurre por una zona de bosque muy bonita.

De vez en cuando los claros del bosque dejan ver las Aiguilles Rouges enfrente y Chamonix abajo.

A medida que se toma altura, la península de tierra entre ambos glaciares se va estrechando y permite ver los glaciares más de cerca.

Glaciar de Taconnaz que baja del Dome y Aiguille de Gouter

Glaciar de Bossons. Al fondo Aiguille du Midi

Recientes desprendimientos han obligado a cambiar el itinerario original y han colocado unas escaleras de la leche en las zonas más complicadas. No se andan con chiquitas estos franceses.

Después de unas dos horas se llega a otro chiringuito, el de las Pyramides ( 1900m), también con terraza y vistas al glaciar. Mucha gente llega solo hasta aquí y come en el restaurante deleitándose con la visión del glaciar de Bossons y el Aiguille du Midi detrás y d su comida.

Como nosotros no teníamos hambre todavía pues seguimos parriba, jajaja...

A partir de aquí el bosque va desapareciendo poco a poco, a la vez que ganan terreno las rocas con lo cual el camino se complica. En ciertas zonas está equipado con clavijas planas que ayudan a atravesar los tramos más difíciles, pero que en ningún caso llegan a ser peligrosos.

Hay que sobrepasar dos collados en los que se cambia la vertiente de ascensión para afrontar el último tramo.

Muy cerca del final se llega a la famosa “Gite a Balmat” o albergue de Balmat, donde pernoctó el famoso escalador en su primer día de ascensión. No es más que un abrigo natural de piedras donde han puesto una placa conmemorativa.

Después de unos diez minutos se llega por fin a “Le Jonction” (2589m) punto culminante de la excursión. Las vistas desde aquí son totalmente alucinantes y compensan con creces el esfuerzo realizado. De verdad que es de lo más bonito que hemos visto nunca. De izquierda a derecha puede verse el Aiguille du Midi, Mont Blanc du Tacul, Mont Maudit, Mont Blanc, Dome du Gouter y Aiguille du Gouter y bajando de todos ellos inmensos glaciares que vienen hacia nosotros. Vamos que la cámara de fotos no paraba, jajaja.

Glaciar de Bossons y Aiguille du Midi (3842m)

Mont Blanc du Tacul (4248m) y Mont Maudit (4465m)

Le Jonction (2590m). Al fondo Dome y Aiguille du Gouter (4304m y 3863m)

Mont Maudit (4465m)

Aiguille de Saussure (3840m)

Aquí aprovechamos para comernos los bocadillos y así disfrutar de más tiempo para contemplar el paisaje.

Camuflado entre las rocas y a salvo de los seracs vimos el Refugio des Grands Mulets ( 3050m) donde los montañeros hacen noche para atacar al día siguiente la cima del Mont Blanc subiendo a cascoporro por todo el glaciar. En realidad, la vía por esta zona no suele comenzar en el Chalet de Bossons (1400 m) sino en el cercano Plan de l’Aiguille ( 2230 m) por el ahorro de desnivel que supone.

Unos montañeros estaban subiendo hacia allí.

 

Al lado nuestro estaba también comiendo el abuelete del comienzo, al final llegó incluso antes que nosotros a su ritmo tranquilo pero constante. Es nuestro héroe!!! Donde hay que firmar para llegar así a su edad!!!!

Después de un gran acto de fé decidimos dejar aquel maravilloso lugar, incluso nos planteamos emular a Balmat y hacer noche en su albergue, jejeje. Pero iba a ser q no.

Dome du Gouter (4304m)

En volver tardamos algo más de tres horas y sobretodo la bajada final por bosque se hace un poco pesada. Son en total 1200 m de desnivel y las rodillas estaban ya “calentitas”. Esta bajada nos recordaba a la que hicimos hace unos años en Ordesa desde el mirador de Calcilarruego hasta la pradera. Aprovechamos para seguir haciendo fotos, que es lo nuestro, jajaja.

Antes de bajar en el telesilla nos pasamos de nuevo por el chalet de Bossons a tomarnos unas merecidas cervezas que nos supieron a gloria. Por desgracia ya se había terminado el pastel q hacían tan fabuloso. Si lo llego a saber les digo que me lo reserven. Bueno ya lo sabemos para otra vez, jajaja.

Nid d’Aigle-Refugio Tete Rousse (10-8-2011)

Distancia: Aproximadamente 8 Km.

Cota mínima: Nid d´Aigle 2.370 m

Cota máxima: Tete Rousse 3.170 m.

Desnivel: 800 m.
Dificultad técnica: Sencilla (no tiene pasos complicados al menos en verano). Hay q atravesar un poco d glaciar.

Material usado: Bastones y crampones.

Se trata de la primera etapa de la ruta normal al Mont Blanc, aunque hay mucha gente que en el primer día de ascensión llega hasta el Refugio de Gouter, casi 700 metros más arriba. Nosotros como teníamos que volver en el mismo día nos conformamos con llegar hasta el Tete Rousse (3170m) y disfrutar desde allí de las vistas tan maravillosas que tiene, juasss.

Para compensar que el día anterior, en el que subimos al Aiguille Croche, hizo tan nublado, hoy ha amanecido totalmente despejado aunque con bastante frío. La cámara va a ardeeeeeeeeeerrrrrrrrrr!!!!!!!!!!!

Para llegar al Nid d’Aigle (2370 m) o Nido del Águila se toma un tren de cremallera que sale desde el pueblo de Le Fayet y tiene paradas en Saint Gervais les Bains, Col de Voza y Bellevue. Nosotros cogimos el primer tren del día en Saint Gervais, que es donde estábamos alojados, a eso de las 7:30 de la mañana y llegamos al Nid d’Aigle un poco después de las 8:30. Es un transporte muy usado, tanto por turistas como por montañeros y de hecho una vez que has llegado arriba tienes que reservar sitio para el tren de vuelta, al menos es así en temporada alta. A esta hora tan temprana no tuvimos ningún problema, la mayor parte de la gente subía con la intención de atacar el Mont Blanc y obviamente no pensaban bajar en el mismo día, jajaja. La hora que se tarda en llegar se nos pasó enseguida, debía ser por la emoción y el paisaje.

Así que una vez en el nido del pollo, perdón del Águila, y después de hacernos un poco los remolones para dar tiempo a que toda la procesión se alejara hacia arriba, remontamos el vuelo camino de la Tienda de Cabeza Rosa, gran jefe indio de la zona, jajaja. En la guía que llevábamos marcaba tres horas en subir y dos horas en bajar y nosotros a un ritmo muy tranquilo tardamos justamente eso, así que se puede hacer en bastante menos tiempo si hay necesidad.

Vistas desde el Nid d’Aigle.

El camino comienza siguiendo una pista ancha que es continuación de la vía del tren, pero al poco se toma una senda que sale a la izquierda y que toma altura decididamente. Si hubiéramos seguido recto se llegaría hasta un bar que han montado cerca de la lengua terminal del glaciar de Bionassay. Habrá que pasarse a la vuelta...

Este carricoche va cargado de cervezas derechito para allá.

El camino va trazando zetas y ganando altura rápidamente. Cada vez se divisa mejor la Aiguille de Bionassay y su glaciar y también la Aiguille de Gouter. Por esta zona abunda la cabra montes o “bouquetin” como dicen por aquí.

Hasta vimos una “cabra roja” que es endémica de la zona... jajajaja.

El camino gira a la izquierda para bordear la morrena del antiguo glaciar que bajaba desde el Tete Rousse y que ahora es un pedregal inmenso, con razón le llaman “Desert de Pierre-Ronde” o Desierto de Piedra Redonda

Al poco se llega a la cabaña de Rognes (2768m) que no está guardada pero que sirve para hacer noche dignamente. Aquí finaliza la considerada “parte segura” del camino al Mont Blanc. De hecho hay un cartel que te avisa que a partir de aquí hay riesgo de avalanchas desde el Tete Rousse y que no se aconseja salirse del camino. Nos hicimos los locos y seguimos parriba.

Ya de vuelta en Madrid nos enteramos que los años anteriores han estado drenando el glaciar del Tete Rousse, ya que debajo de el se estaba acumulando una cantidad importante de agua y había riesgo de colapso, lo cual podría causar graves consecuencias.

Si quereis más info podeis ver este video:
http://www.youtube.com/watch?v=pUp6d9kbMas

Y este reportaje:
http://www.barrabes.com/revista/noticias/2-6743/comienza-mont-blanc-drenaje-lago.html

El camino enfila ahora derechito hacia la Aiguille de Gouter. El camino va por el contrafuerte que asciende por su derecha.

 A la izquierda comienza a verse ya la Aiguille du Midi y  las Agujas de Chamonix.

A partir de aquí el camino se empina considerablemente y a tramos está equipado con cable en ciertas zonas más aéreas que con nieve o hielo pueden resultar peligrosas.

Las vistas son cada vez más impresionantes.

Una vista atrás donde se ve por donde hemos subido: 

Ya estamos cerquita, podemos ver el refugio a la vera del glaciar.

Aquí había unos mendas que estaban colocando unos cables no sé muy bien para qué. Iban sin asegurarse ni ná, total pa que.

La verdad es que el refugio está colocado en un buen sitio.

Para llegar hasta él hay que atravesar el Glaciar de Tete Rousse, así que nos colocamos los crampones. Mucha gente lo cruzaba sin ellos porque hay buena huella sobre la nieve y es una zona más o menos plana.

Una vez al otro lado buscamos un buen sitio donde dar cuenta de los bocatas, que ya era hora, y disfrutar del paisaje. Entre bocado y bocado más fotos. El día engañaba, muy soleado, pero el aire venía fino, así que nos abrigamos con todo lo que traíamos.

Detrás de Bon, la Aiguille de Bionassay (4052m), como la ropa del Decathlon, jajaja.

La Aiguille de Gouter (3863m) dominándolo todo.

Arriba puede apreciarse el Refugio de Gouter (3817m)

El Refugio de Tete Rousse desde arriba. No tiene mala pinta, pero no llegamos a entrar por no quitarnos los pinchos.

Tirando de zoom vimos la famosa “bolera” por donde se atraviesa el “Grand Couloir” o Gran Corredor camino del Refugio del Gouter.

Aquí la gente cruza a toda prisa por que en cualquier momento pueden caer ñascos desde arriba y provocar un accidente. No sería la primera vez.

Se forman unos atascos tremendos por que sólo se puede cruzar por un sitio.

La verdad es que la caravana de gente que va o viene del Mont Blanc es interminable.

Por desgracia hay algunos compañeros que no vuelven.

Como en el refugio no hay sitio para todos, muchos acampan a los pies del Gouter.

Muy a nuestro pesar tenemos que regresar. Un último vistazo al entorno.

El camino de bajada lo hicimos por el mismo sitio al de subida y tardamos unas dos horas.

Estas deben estar hasta los “cuernos” de ver montañeros. Mami y bambino.

Como llegamos con tiempo de sobra para coger el tren de vuelta nos acercamos hasta la lengua del Glaciar de Bionassay y allí estuvimos merendando, jajaja.

Tuvimos que esperar bastante al tren, que llegó con más de media hora de retraso. El abuelo d Bon que fue ferroviario hubiera puesto el grito en el cielo, jajaja.