Descripción y fotos de las rutas que hemos realizado por España y parte del extranjero.

martes, 21 de agosto de 2012

HOCHFURLEG (2.943 m) (01-08-2012).


DISTANCIA: 9km.
COTA INICIAL: 2310m
COTA MAXIMA: 2943m
DESNIVEL ACUMULADO SUBIDA:  700m.
DIFICULTAD: Un poco de trepada sencilla al final.
MATERIAL: Nada en especial. Sólo se atraviesa glaciar en un breve tramo.
GPS: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3240104

Al día siguiente de patear por el glaciar Pasterze y aprovechando que amaneció un día cojonudo, nos acercamos hasta la zona del lago Weiβsee, uno de las sitios más bonitos de por aquí, con la intención de subir a algún pico de la zona. El lago, que está represado, se localiza a una altitud de 2250m. Hay un refugio-hotel, diríamos de “lujo” para ser zona de montaña, llamado Rudolfshutte al que llega un teleférico desde el valle, cerca del pueblo de Uttendorf. Salva un desnivel de 850 metros en dos tramos.





El lago tiene ese color tan característico del agua proveniente de deshielo de glaciar y que le da una luminosidad espectacular.  Esta rodeado de picos de más de 3000 metros, como el Granatspitze o el Stubacher Sonnblick u otros que se quedan cerca, como el Hochfurleg al que finalmente subimos.

El pico más alto de la derecha es el Hochfurleg (2943m)


De las cercanías del lago salen multitud de senderos, nosotros tomamos uno que lo bordea por su lado izquierdo y que te aproxima hasta el glaciar Sonnblickkees. Seguimos al principio unas marcas azules y blancas, como las de la bandera argentina.





Ya comenzamos a divisar el lago desde arriba.



También lo que queda del glaciar Odenwinkel, en la cara norte del Johannisberg.




Detrás del pico que aparece en primer plano y a la derecha está el Hochfurleg, hasta donde llegamos en este día esplendido.


El camino es bastante bueno hasta el glaciar, y en aquellas zonas más complicadas, está un poco acondicionado.



Después de hora y media llegamos a una laguna helada donde termina el glaciar del Sonnblick. Descansamos un poco y nos hartamos de hacer fotos.





Después de comer algo seguimos para arriba. Al llegar a otra laguna, la bordeamos por la izquierda y seguimos unas marcas que ahora han cambiado la bandera albiceleste por la austriaca, de color rojo y blanco.



Desde arriba la primera laguna se ve preciosa.



Se progresa por una zona rocosa que deja el glaciar a la izquierda. Detrás se ve el Granatspitze (3086m) y su hermano el Stubacher Sonnblick (3088m).

Granatspitze



Granatspitze a la izquierda y Stubacher Sonnblick a la derecha

Y hacia abajo el Weiβsee.


Llega un momento en que se atraviesa brevemente el glaciar y una zona de neveros.




Enfrente nuestro se veían ya montañeros que bajaban de hacer cumbre.




El cortado entre los dos picos es espectacular.


Llegamos a un pequeño collado que da paso a la cara Norte de las montañas, que parece menos atractiva que la Sur. Hay un cartel que indica precaución si nos dirigimos a la arista de la izquierda, que está muy descompuesta.



Como somos muy rebeldes subimos un poquito por la arista, jajaja. Desde ahí tomamos esta foto de la cima del Hochfurleg.


Y esta otra de los tres hermanitos, jejeje.


Luego descendimos y subimos hasta el Hochfurleg. Desde allí las vistas son espectaculares, hasta se ve el pico del Grossglockner. Tardamos un poco más de tres horas y media en llegar.


Y la presa Tauernmoossee.


En la cumbre hay una cruz de madera, como en otras muchas cumbres de la zona. Al fondo se ve el circo glaciar del Odenwinkel . De izquierda a derecha las caras norte del Hohe Riffl (3338m), Johannisberg (3453m) y Eiskogele (3426m), que ponen los pelos de punta.



Estas cumbres estaban también en la agenda, pero problemas con la meteorología no nos dejaron intentarlo. Se fueron encadenando los días lluviosos y nos fue imposible.
Después de recrearnos con las vistas emprendimos el camino de regreso. Tardamos unas dos horas en descender.


Por la tarde el Weiβsee tenía un color más bonito si cabe.


Para terminar, como ya es tradición, unas cervecitas en el refugio, para recuperar fuerzas, jajaja.


lunes, 20 de agosto de 2012

TRAVESIA GLACIAR PASTERZE (31-07-2012)


DISTANCIA: 10km.
COTA MINIMA: 2120m
COTA MAXIMA: 2450m
DESNIVEL ACUMULADO SUBIDA: 580 m.
DIFICULTAD: Travesía sencilla por un glaciar prácticamente llano y sin nieve.
MATERIAL: Crampones. Recomendable ir encordado.

Durante nuestras vacaciones de verano por los Alpes austriacos una de las citas ineludibles era visitar el glaciar Pasterze, el más largo de la zona oriental de los Alpes, con más de 8 kilómetros de largo. Nace a los pies del Johannisberg (3453m) y discurre parelelo a la cordillera del Grossglockner (3798m), el pico más alto de Austria. Es uno de los glaciares alpinos que más está notando el calentamiento global y pierde una media de 15 metros de largo al año y entre 3 y 5 de espesor. Está previsto que prácticamente desaparezca dentro de 35 años. Una pena.

Para visitarlo es fácilmente accesible por la carretera alpina de peaje del Grossglockner, que te deja cerca de su lengua terminal, en la Kaiser Franz Josef Haus a 2370 m de altitud. Hasta aquí llegaba el glaciar en 1850. Ahora hay que descender hasta los 2200 metros para poder pisar hielo. Y eso fue lo que hicimos, bajar por un caminito que sale cerca de la cabecera del funicular y te deja cerca del final del glaciar.







A medida que descendíamos nos íbamos encontrando con letreros que indicaban hasta donde llegaba el glaciar en años anteriores y así podías comprobar su retroceso vertiginoso. Si alguien le interesa verlo le recomiendo que se dé prisa.



Al cabo de casi una hora se llega verdaderamente a lo que es el glaciar, después de atravesar una zona muy inestable, mezcla de barro, hielo y piedra y donde se queda la mayoría de la gente. Más abajo se forman unas lagunas procedentes del agua del deshilo del glaciar.






Aquí nos pusimos ya los pinchos y nos encordamos. Sinceramente creo que la parte de glaciar que recorrimos puede hacerse sin encordarse, pero nosotros queríamos practicar la técnica de ir encordados por glaciar para futuras citas más complicadas. Es un glaciar con una pendiente muy suave, con pocas zonas de seracs y además desprovisto de nieve en la época en que nosotros fuimos. Pero bueno, mejor pasarse que no llegar en tema de seguridad.



Ya con todos los archiperres puestos tiramos palante sin ningún objetivo concreto, sólo disfrutar del paisaje y darnos la vuelta cuando nos cansáramos.




La zona más peliaguda se encuentra casi al inicio, donde las grietas son más profundas y anchas. Nosotros las sorteamos por la derecha, pegados a una zona más llana cubierta de derrubios arrastrados por el glaciar. Por aquí nos topamos con un guía que estaba enseñando a un grupito como progresar por un glaciar.







La pendiente prácticamente no se nota y se progresa fácilmente. Pocas veces tuvimos que retroceder sobre nuestros pasos para rodear una zona más inaccesible. Aunque vimos algunos agujeracos que daban un poco de miedo, te caes dentro y estás bien jodido. Es increíble observar de cerca la fuerza que tiene un glaciar para modelar un paisaje y arrastrar lo que se le ponga por medio.






Nos parábamos a cada momento para sacar la cámara y hacer fotos. Es una pena que el Grossglockner no se dejara ver, por desgracia este tiempo nuboso fue la tónica de todas las vacaciones y nos impidió hacer la mayoría de las rutas que teníamos en mente. En cambio el Johannisberg  no se escondió en ningún momento y nos vigiló durante todo el camino. Las lenguas glaciares que bajan por sus costados son realmente espectaculares.












Muy cerca de la cima del Grossglockner está el refugio Erzherzog-Johann a 3451 metros de altitud, al que sacamos esta foto en un claro de las nubes. Aquí suele hacerse noche para acometer la ascensión de la cima. En la foto pueden verse las vías de escalada por esta cara, que a mí me parecen todas espeluznantes. Creo que por la cara oeste es un poco más sencillo. Enfrente, al otro lado del valle, está el refugio Oberwalder, a 2972 m de altura.




Vimos una foto de principios del siglo pasado y la cima que se ve a la izquierda estaba casi tapada por el hielo. La disminución del espesor ha sido brutal. En la actualidad la superficie del glaciar está recorrida por infinidad de pequeños arroyuelos que canalizan el agua del deshielo.





Hacia atrás y a lo lejos vemos la zona hasta donde llega la carretera.
Nosotros llegamos casi hasta el circo que se ve al fondo antes de darnos la vuelta y practicamos un poco la progresión en glaciar en una zona más empinada. De regreso parece que se despejó un poco el cielo y nos dejó ver unos minutos la cima del Grossglockner.







Aunque por poco tiempo, al rato nos calló un chaparrón subiendo hacia la carretera.
En fin, una ruta muy recomendable y sencillita para empezar a andar por glaciar, además de ser una zona espectacular.