DISTANCIA: 14km.
COTA MINIMA: 925m
COTA MAXIMA: 1570m
DESNIVEL ACUMULADO SUBIDA: 680m.
DIFICULTAD: Fácil, aunque con trepadas
sencillas y cortas que requieren prestar atención para encontrar el paso más
cómodo.
MATERIAL: Botas y bastones. En verano gorra y
crema solar que pega el sol de lo lindo y no hay sombra.
Después de unos meses de sequía montañil teníamos unas ganas locas de salir a hacer un poco el cabra por el monte, y para hacer el cabra no hay mejor sitio en Madrid que la Pedriza del Manzanares, donde abunda el “rocaje vivo”, jajaja. No queríamos tampoco machacarnos mucho porque estábamos un poco bajos de forma después de unos inoportunos resfriados, pero como iba a hacer bueno había que aprovechar. El plan era hacer la Senda Maeso o de la Rinconada hasta la zona del Acebo o por ahí, comer, siesta y bajar por el mismo sitio hasta el pueblo, pero al final nos liamos y seguimos hasta el Collado de la Dehesilla para volver por el Arroyo de la Majadilla hasta Canto Cochino y de ahí al Tranco por el río Manzanares hasta el pueblo otra vez. Total un día fabuloso para disfrutar de esta maravillosa ruta en primavera.
Después de unos meses de sequía montañil teníamos unas ganas locas de salir a hacer un poco el cabra por el monte, y para hacer el cabra no hay mejor sitio en Madrid que la Pedriza del Manzanares, donde abunda el “rocaje vivo”, jajaja. No queríamos tampoco machacarnos mucho porque estábamos un poco bajos de forma después de unos inoportunos resfriados, pero como iba a hacer bueno había que aprovechar. El plan era hacer la Senda Maeso o de la Rinconada hasta la zona del Acebo o por ahí, comer, siesta y bajar por el mismo sitio hasta el pueblo, pero al final nos liamos y seguimos hasta el Collado de la Dehesilla para volver por el Arroyo de la Majadilla hasta Canto Cochino y de ahí al Tranco por el río Manzanares hasta el pueblo otra vez. Total un día fabuloso para disfrutar de esta maravillosa ruta en primavera.
Aparcamos el coche en la urbanización el
Alcornocal de Manzanares el Real, en su parte más alta, al final de la calle
Menéndez Pidal donde acaban los chalets. Ahí comienza la Senda Maeso
propiamente dicha. En otras ocasiones hemos querido hacer alguna ruta circular
bajando por esta senda desde la Pradera del Yelmo, pero no ha habido huevos de
encontrarla entre tanto conglomerado rocoso y ningún tipo d señalización.... Esta vez la haríamos de subida
para ver donde conecta con los senderos superiores de la Pedriza.
Había dos factores a nuestro favor para que en
esta ocasión no nos perdiéramos, todo un clásico eso de desorientarse por la
Pedriza, al menos para nosotros jajaja. El primero es que llevábamos armamento
pesado, es decir un GPS. Y el otro es que, recientemente, voluntarios de la
Federación Madrileña de Montañismo se han dedicado a señalizar y limpiar
caminos y este debe de ser uno de ellos.
Desde aquí nuestra más sincera enhorabuena!!!! Y un cero patatero para
la Comunidad de Madrid, que pasa “olímpicamente” de gestionar la red de
senderos, como no se pueden privatizar debe ser que no interesan...
Total que a eso de la 10 tiramos parriba
disfrutando de las vistas desde el inicio.
Por aquí se ve a gente escalando en las
numerosas vías que hay por la zona.
Hacia el Sur ya se ve el embalse de Santillana que está a rebosar, menos mal, sino este verano nos tocaba bebernos los posos, jajaja.
El camino se dirige hacia el norte y al rato
ya se divisa El Yelmo (1716m).
Hay que seguir en todo momento las marcas
blanca y amarilla del PR-M1.
En primavera esta zona está preciosa con todo
en flor.
No te cansas de admirar las rocas son esas
formas tan peculiares.
A este otro no sé cómo llamarle, jajaja.
Después de aproximadamente una hora se llega a
la Gran Cañada (1270m), ancho corredor que viene del Collado de la Pedriza.
Pero basta con no perder de vista las marcas.
Estos parecen moais de la Isla de Pascua.
Más y más piedras.
En algunos tramos el camino se complica y hay
que echar las manos, pero nada complicado.
Las jaras van dejando paso a los robles, que
acaban de echar las hojas
Ya estamos más cerca de La Rinconada. Hay que
dirigirse hacia el peñasco del fondo.
En La Rinconada aprovechamos para tomar algo
en una sombra y disfrutar de las vistas del Yelmo. Hasta aquí hemos tardado dos
horas y media.
A partir de aquí hay que seguir dirección
norte subiendo por un barranco que se ve enfrente, tapado por la jara.
Siguiendo las marcas del PR se encuentra el camino.
Se llega a una zona más despejada y llana con
unas excepcionales vista hacia el Este.
El camino se dirige hacia los riscos del Acebo a la izquierda y la Caperucita a la derecha. Desde luego el que puso nombres a esta zona se lo pasó en grande.
La erosión es caprichosa.
Esta vista con el Embalse de Santillana al
fondo nos gustó mucho.
Una foto del Acebo (1626m). Hasta aquí tardamos
unas tres horas y media, paradas incluidas y tropecientas fotos.
Superado este risco, la senda empieza a bajar
hacia el Collado de la Dehesilla (1453m), que ya se ve debajo de La Pared de
Santillana (1824m).
Esta es una zona que tiene un encanto
especial, siempre me ha gustado, desde que acampamos aquí hace la friolera de
20 años.
Poco antes de las cuatro empezamos a bajar
tranquilamente hacia el Tolmo.
Un poco más abajo del Tolmo hay una fuente que
viene bien para refrescarse.
La vista hacia el Circo y las Torres de la
Pedriza es espectacular.
Enseguida se llega a un descampado, dejando a
mano izquierda el Refugio Giner de los Ríos. Se sigue de frente hacia donde se
junta el arroyo de la Dehesilla con el de los Poyos para formar el Arroyo de la
Majadilla, donde hay un puente que cruzamos.
A partir de aquí el paisaje cambia
completamente. El camino transita por un bosque de pinos, cuya sombra se
agradece. La fauna también cambia, las pezuñas de las cabras monteses dejan paso a las chanclas y el bañador del dominguero y los cuernos a la nevera, bueno algunos conservan los
cuernos también…
Al otro lado del río vemos Peña Sirio.
El camino no tiene pérdida, se trata de seguir
el margen del río hasta llegar a unas casas forestales. Sobrepasadas estas se
gira a la izquierda, dejando Canto Cochino y la muchedumbre y los chiringitos a
la derecha. Se llega a una explanada que atravesamos y a un puente que
cruzamos.
Por este margen del río también puede llegarse
al Refugio.
El camino está cada vez más transitado a media
que nos acercamos al Tranco.
Una vez allí nos tomamos las jarritas de cerveza de rigor y ya refrescados nos dirigimos hacia el coche, que todavía está a media hora de camino, atravesando las urbanizaciones por las calles de Madreselva, Salvador Dalí y Leonardo da Vinci hasta la calle Menéndez Pidal donde dejamos el coche. Llegamos a eso de las siete y media, como el juego de cartas, jajaja. Total más de 9 horas desde el inicio, con siesta y cervecitas incluidas eso sí.
Os puedo llamar dioses por que habéis pisado el cielo. Un abrazo.
ResponderEliminarjajajajaja... siempre es un placer ir a la Pedri... y en primavera está preciosa. Un abrazo
ResponderEliminarHe descubierto vuestro blog recientemente, me gustan mucho las fotos y los comentarios que hacéis. La semana pasada hice parte de la ruta que comentáis y os envío mis anotaciones. http://bichosenclase.blogspot.com/2020/06/circular-por-la-pedriza-anterior.html
ResponderEliminarBuenos días Valentín.
EliminarMe alegro que te gustase la ruta. Es una gozada poder disfrutar del campo tan cerca. Como sabrás, escenas del peliculón "El Cid" se grabaron allí, al igual que algunas de "Espartaco".
Veo que también eres un apasionado del arte. Nuestra debilidad es el arte románico (esas iglesias y ermitas maravillosas). Aunque también nos fascina el gótico, el renacimiento... Peridis es nuestro maestro.
Un saludo